No se si soy yo la rara o yo la normal, pero lo cierto es que es impresionante como cambia mi estado animico junto al cambio de estaciones.
Si viviera en un pais tropical, andaría alegre todos los días de mi vida.
Ahora que esta llegando el sol y el calorsito a Santiago mi estado animico ha cambiado tanto, que hasta se ve reflejado en el trabajo, lugar donde siempre me lleve mal con casi todos y ahora ya no tanto.
Me encanta el sol, vestirme ligera, sentir los rayos en mi piel, el calor, el sudor...
Algo hay en el verano y la primera que me hace renacer, como un ave fenix. Me hace dejar atrás todo eso que me mantiene en un estado permanente de "depresión" (no es tan así, pero es una forma de definir mi actitud en invierno y otoño) y me hace comenzar a brillar, a tener más energías, más alegrías, me cambia radicalmente...
Como me encantaría que los 365 días del año fueran tan hermosos como estos últimos días.
Primavera y verano... sean eternas por favor.
Hoy me siento tan alegre...
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