La Vida en un Sueño

Sus pequeños ojos se llenaban de vida.

Veía como andaba en bicicleta. Realmente le encantaba salir a pasear en su bicicleta por las calles del lugar donde vivía.

Su madre siempre estaba preocupada por él. Lo cuidó las innumerables veces que sus rodillas sangraron, lo buscaba y, día a día, lo preparaba para ir al colegio, su desayuno, su ropa, su colación…

A los 13 años dio su primer beso. Nunca lo pudo olvidar, a él le gustaba mucho Claudia.

A los 15 lo suspendieron por primera vez. Que gracioso fue tirarle agua al profesor de matemáticas, él siempre odio las matemáticas… No fue tan gracioso ver lágrimas en los ojos de su madre, ni la risa de su pequeño hermano.

A los 18 entró a la universidad… Su sueño era ser abogado.

Fue una etapa difícil, Reprobó algunas clases, otras tantas se le hacían fáciles. Las fiestas, el alcohol, las drogas… conoció todo y supo mantenerse firme en su camino, siguiendo su norte…Como no hacerlo, si su madre trabajaba 15 horas y más diarias solo por él?

En su último año conoció a Ximena, ella iba un grado más abajo que él.

Se titulo y a trabajar… Ese año, para el cumpleaños de su madre, la llevo a pasear a la playa por todo el fin de semana. Era un hijo orgulloso y feliz, deseoso de devolver a su madre por lo menos la mitad de lo que ella hizo por él.

Dos años después Ximena se embarazo y decidieron casarse. Él no había tenido padre y quería ser el mejor para su hijo.

A los 9 meses nació Joaquin, su primer hijo. Luego Carla y María Jose.

Su madre vivía con ellos, su hermano era un hombre exitoso, su esposa una mujer maravillosa y una madre fenomenal, Joaquin ya iba a ser padre, tenía tan solo 17 años. Carla y María Jose eran lindas e inteligentes.

Sentía que siempre había sido feliz, a pesar de que en esos momentos pasaba una crisis económica,  pero él sabía que el dinero no importaba mientras el amor llenara sus corazones.

Estaba agradecido de la vida y de pronto…

¡Qué ocurre?!

Sus pequeños ojos se apagaron, ya no brilla la luz de vida.  El ambiente se pone denso, respirar se hace dificultoso. Él intenta luchar, escapar, pero algo lo jala obligándolo a descender. Trata de aferrarse, pero sus pequeños brazitos no son capaces de responder y una “aspiradora gigante” termina por subcionarlo…

Su vida fue solo un sueño, no le dieron la oportunidad de reír, de llorar, de cometer errores, de sonreír. No tuvo la oportunidad de vivir.

Quien es aquel capaz de decidir quién vive y quien muere?

Quien es aquel capaz de culpar a un ser inocente de sus errores?

Quien es aquel capaz de apagar la luz de vida en un ser deseoso de vivir?

Quienes somos para asesinar a quien mañana podría ser feliz?

Vivamos y dejemos vivir.

No al aborto, si a la vida.